Página anterior | Índice | Página siguiente |
CAPITULO IV, REFLECTORES
Reflector de mesa:
Entre los accesorios más modernos, el primero al que nos referiremos es el conocido como reflector de mesa, como su nombre indica está diseñado para ser sujetado a la mesa durante el juego. Así se describe en el catálogo:
"Reflector de mesa: se fija a la parte inferior de la mesa presionando sobre unos ganchos. Un delicado espejo asoma por el borde de la mesa permitiéndole ver las cartas a medida que las reparte. Puede colocar el espejo en cualquier ángulo o retirarlo de la vista en un instante".
fig. 20
Dado los numerosos ejemplos que se encuentran en la literatura "deportiva" (1), como el descrito anteriormente, es lógico suponer que en algunos distritos de América son accesorios caros. El reflector a que se refiere la sentencia anterior se ilustra en la imagen 20. Se trata de un accesorio finamente acabado y niquelado. El espejo como suele ser habitual es convexo (2), formando una imagen en miniatura de las caras de las cartas. La figura A representa la posición del espejo mientras se está usando. La figura B muestra el espejo en su posición inicial y fuera de la vista. La bisagra está provista de resortes de baja fricción que permiten que el espejo se mantenga en la posición elegida.
La forma correcta de colocar el reflector es presionar la punta de acero por la parte inferior de la mesa lo suficientemente atrás para que la bisagra quede a nivel del borde inferior de la mesa. Contrariamente a lo que se pueda pensar, mientras el espejo está en uso se le da una inclinación hacia arriba tal y como puede verse en la figura. Por lo tanto, mientras el tahúr se inclina un poco hacia adelante como se suele hacer cuando se reparte cartas, éstas se reflejan en el espejo y las ve mirando un poco hacia atrás. Usado de esta manera puede desplegarse en cualquier lugar e incluso aquellos familiarizados con los reflectores lo admitirán sin sospecha. Inclinado hacia abajo puede ser más fácil de usar, pero en ese caso el tahúr tiene que recostarse un poco mientras reparte, una actitud como esa atraería la atención y levantaría sospechas, en todo caso es mejor confiarlos ya que el tahúr ha de conservar la tranquilidad mental tan necesaria para la consecución de sus planes. Es posible que nada de esto ocurra, pero por otro lado sí que puede darse. Uno nunca es lo suficientemente precavido cuándo incluso las acciones más inocentes son susceptibles de ser malinterpretadas. El mundo es tan poco caritativo que el descubrimiento de un insignificante espejo podría llevar a un montón de desavenencias, ¿quién lo sabe?, en caso de que cualquiera se coloque tras el repartidor mientras el espejo está a la vista. Siempre puede ocultarse con el dedo meñique en la acción de coger las cartas de la mesa, o bien sentándose muy cerca de él puede ocultarlo por completo.
Notas: 1 Maskelyne se refiere a "literatura deportiva" en forma figurada, ya que en realidad se está refiriendo a los catálogos de venta por correo de material para tahúres, ver.
2 Los reflectores siempre deben ser convexos, esto nos garantiza que el espejo siempre refleje la imagen de la carta. Un espejo plano debe estar orientado con mucha más precisión si se quiere capturar la imagen de la carta, por lo que son mucho más difíciles de usar, así mismo al no reducir la imagen, se requiere de un reflector más grande.