La baraja Houdini permite la realización de una de esas rutinas facilonas que tanto gustan a los principiantes, es una baraja que puede ser empleada con otros fines, aunque de escaso interés.
Efecto: El cartómago muestra al espectador una baraja cuyas cartas poseen todas, un agujero en una de sus esquinas. Extiende la baraja mostrando que todas sus cartas son distintas. A continuación, se da a elegir al espectador una carta por hojeo de la baraja. El mago pasa entonces uno de los extremos de unas esposas en miniatura a través de todas las cartas, el otro extremo suele atarse a uno de los pulgares del espectador como garantía de que no se manipulará la baraja. El mago muestra entonces toda la baraja al espectador, la misma se encuentra ordenada por palos para facilitar este proceso. La carta elegida por el espectador ha desaparecido. Puede si se desea, hacerla aparecer en cualquier otro lado, por ejemplo, en el estuche.
Fabricación de la baraja: La baraja debe estar perfectamente perforada para que cuadren todos los agujeros, puede usarse una plantilla a este objeto, recordar también perforar la carta duplicada.
Ordenación de la baraja: Bara facilitar la búsqueda de la carta del espectador una vez que deseamos mostrar que su carta ha desaparecido, la baraja está ordenada por palos y por orden del As al rey.
Gimmick para forzar la carta: El gimmick que permite forzar la carta es sencillo, consiste en una carta corta a la que se le ha pegado por su parte posterior una carta normal, normalmente la dama de corazones. El agujero estará en la esquina superior derecha si tenemos las caras de las dos cartas hacia nosotros. Las dos cartas estarán pegadas por el extremo corto opuesto al agujero mediante una tira delgada de pegamento. Cuando abramos la baraja en abanico para mostrar al espectador que su carta ha desaparecido, las esposas y la franja de pegamento impedirán que pueda verse la carta elegida, ya que pasará ante los ojos de los espectadores como una carta sencilla. El gimmick se coloca a dos tercios, o tal vez un poco más para el final de la baraja de modo que adaptaremos nuestra velocidad dependiendo de que intenciones veamos al espectador. La carta a elegir se hace mediante hojeo del extremo corto de la baraja en el que está el agujero. Al hojear las cartas el dedo parará automáticamente en la carta corta, quedando a la vista la carta larga pegada a ella, es decir la dama de corazones.
Para hacer aparecer la carta en el estuche, este debe ser mostrado previamente vacío, para ello colocamos la carta duplicada que queremos forzar entre el celofán del estuche y el lado de la caja que representa el dorso de la baraja, (en modelos Bicycle por ejemplo). Se saca la baraja del estuche llevando cuidado de que la carta duplicada permanezca en su lugar, ésta permanecerá oculta al espectador debido a que cree que el dorso de la carta es el diseño de la caja, se muestra ésta última vacía y se deja a un lado. Cuando se quiera hacer aparecer la carta se simula sacarla del estuche, para ello lo cogeremos con la pestaña hacia arriba y la carta oscura hacia abajo, se mete el pulgar dentro del estuche y se simula la extracción de la carta, la pestaña abierta del estuche tapará a los espectadores la visión de lo que ocurre en realidad.
Notas: Algunos magos inexpertos tienen miedo de que el espectador diga alto demasiado pronto, mientras que un cartómago experto sabrá interpretar el lenguaje no verbal del espectador para adaptar la velocidad de hojeo dependiendo de las circunstancias. Este hecho me inspiró para hacer una modificación a la baraja en la que se coloquen dos cartas trucadas o gimmick, una a un poco más de un tercio del inicio de la baraja y otra a un poco más de un tercio de la baraja. Si además estos dos gimmick se fabrican con cartas distintas podremos repetir el efecto.
Esta versión de la baraja Houdini es la más moderna, pero puede emplearse otros elementos para pasarlos por el agujero de las cartas, por ejemplo, un candado o una delgada cuerda de nylon que se da a sujetar entre dos espectadores.